Carmenère

Este vino tiene una buena intensidad en nariz, es compleja, frutal, donde destacan notas de especias, como la vainilla, clavo de olor y pimienta negra. Tiene cierto frescor aportado por sutiles aromas vegetales como el pimiento rojo y la razón de estos aromas se debe a que el principal viñedo que da origen a este vino se encuentra ubicado muy cerca del río, donde sus aguas son frescas en el verano y, por otro lado, debido a que en las tardes de verano, recibe un fresco viento que se origina en el océano pacífico y que recorre el valle hacia la cordillera de los Andes. El suelo donde está ubicado este viñedo es de origen volcánico, con formación del tipo aluvio-coluvial, de textura franco limoso a franco-arcilloso, con presencia de grava y muy buena profundidad, por lo tanto la boca que encontramos en este vino es de muy buena textura, suave, de cuerpo medio, taninos elegantes y suaves. Muy equilibrado en su relación ácido-alcohol y muy sabroso dado la presencia de aromas de boca como la mora madura, canela, clavo de olor. Es un vino con buena persistencia.